Significaba torturar’, derivado de tripalium "especie de cepo o instrumento de tortura", compuesto de tri "tres" y palus "poste, estaca", por los tres maderos cruzados que formaban dicho instrumento, al cual era atado el reo para ser torturado. Posteriormente, fue utilizado para referirse a todas aquellas cosas que son difíciles, incómodas de hacer o traen poco bienestar como trabajar.
Descendiente: Trabajar
Se cree que viene de la expresión romana “dinero hecho de sal” debido a la paga de los soldados romanos consistía en sal debido a su alto precio. Esta afirmación no está comprobada pero la más extendida, debido tanto a que no se encuentran registrados pagos hechos total o parcialmente con sal en la antigüedad clásica, debido a que el valor de la sal era mucho menor que el de los metales preciosos con el que se acuñaban monedas.
Descendiente: Salario
Significa ‘el que viste de blanco’, derivado del verbo candere ‘ser blanco’, ‘brillar intensamente’, voz con la que se designaba en Roma a quienes se presentaban como aspirantes a cargos públicos. En el ritual político romano. Los candidatos debían cambiar su habitual toga por una túnica blanca (candida) con la que se exhibían públicamente, para manifestar la pureza y la honradez esperables en los hombres públicos.
Descendiente: Candidato
Ranciere es algo que está en proceso de putrefacción y desprende un olor desagradable propio de este proceso. Es, metafóricamente, la podredumbre interna causada por el odio.
Descendiente: Rencor, rancio.
Viene de proletarii, quienes eran los ciudadanos de la clase más baja, los Capite Censi, que no tenían propiedades y solamente podían aportar prole (hijos) para engrosar los ejércitos del imperio.
Descendiente: Proletariado
Significa ‘perteneciente al templo’, ‘servidor del templo’, ‘inspirado’, ‘exaltado’, ‘frenético’; se aplicaba a los sacerdotes de Belona, Cibeles y otras diosas, que se entregaban a violentas manifestaciones enloquecidos por un frenesí religioso, y es derivado de fatum que significa‘templo’.
Descendiente: Fanático
Secretarius es la forma adjetiva de ‘secretus’ que significa secreto y del verbo ‘secemere’ que significa ‘poner aparte’. El secretarius era entonces, aquel que guardaba los secretos en algun lugar donde no se podían ver.
Descendiente: Secretaria/Secretario
Cuando se hacían oraciones, estas se rezaban en latín y se terminaban diciendo ‘In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen’ (En español: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amen). Usualmente, al llegar al final de la oración se utilizaban estas palabras en el momento de santiguarse (hacer el gesto de la cruz), pero también era equivalente a haber terminado el rezo obligatorio, por lo que se pronunciaban muy rápidamente y casi en un suspiro, lo que provocaba que las dos últimas palabra casi se dijesen en una sola: sanctiamen, convirtiéndose en sinónimo de hacer algo en un instante’, ‘un suspiro’ o ‘en un momento’.
Descendiente: Santiamén.